Estarás de acuerdo conmigo si te digo que el cash flow de una empresa, también llamado flujo de caja, es uno de los indicadores más importantes para tener un indicador general del estado financiero de una empresa.
El problema suele ser que muchas veces no sabemos calcularlo de una forma precisa o, como es normal, se nos olvidan ciertas partes de su definición.
Por ello, hoy te queremos contar qué es el cashflow, cómo se calcula, qué tipos hay, y alguna sorpresa más.
Qué es el cash flow
El cash flow tiene varios nombres, por ejemplo, además de flujo de caja, que sería la traducción directa del inglés, también se le conoce como flujo de efectivo o flujo de tesorería.
Lo llames como lo llames, el concepto siempre es el mismo:
El cash flow nos dice cuánto dinero hay en la caja en un momento específico para realizar pagos ordinarios como nóminas, proveedores, etc.
Con esta pequeña definición, estoy seguro que te haces una idea de lo importante que es pero, por si te quedan dudas, te cuento más en el siguiente punto.
Por qué es tan importante en una empresa
El flujo de caja es de vital importancia en una empresa por una razón por encima de todas:
Si no tienes dinero en la caja, no puedes pagar a tus trabajadores o a tus proveedores.
Ese es el punto fundamental.
Hay empresas que, según los indicadores, gozan de una gran salud financiera, pero luego la realidad es que no pueden pagar las nóminas, ¿a qué se puede deber?
Hay varias opciones, pero una de las que más ocurre es que una empresa puede tener mucho dinero en inversiones, o simplemente que los proveedores les pagan a 90 días (o incluso más) y, por ello, pueden tener un desfase de liquidez en sus cuentas.
Y este desfase en las cuentas puede hacer que te quedes sin dinero en la caja para pagar las nóminas, con el problema que ello supone.
Cómo se calcula el cash flow
Ahora que ya conocemos la vital importancia de tener un flujo de caja sano, vamos a ver cómo se puede calcular.
La fórmula más sencilla para calcular el flujo de caja sería:
Cash flow = Beneficio neto + Amortizaciones + Provisiones.
Es decir, al beneficio neto de la empresa le sumamos (que realmente es una resta) las amortizaciones y provisiones que hacen más pequeño el efectivo de una empresa, aunque no haya un desembolso de dinero para ello.
Esto se hace así porque realmente estamos midiendo la liquidez en un momento dado.
Pero tranquilo, que lo puedes calcular automáticamente también
Sí, es verdad que la fórmula es sencilla pero que, detrás de ella, suele haber gran cantidad de operaciones y, con ello, puede conllevar a errores, además del tiempo para revisarlo todo.
Lo bueno es que, como te decía, se puede automatizar este proceso para que tengas un cuadro de mandos en el que puedas ver el flujo de caja en un determinado momento y, con ello, vas a ahorrar un montón de tiempo, minimizando además errores.
Si quieres tener tu cálculo de cash flow automatizado, tienes dos opciones:
- O bien tienes una solución de ERP que contenga este cuadro de mandos, leyendo los campos de ingresos, gastos, amortizaciones y provisiones.
- O bien tienes una aplicación satélite que lea los datos de tu ERP y las distintas bases de datos que necesites, y te pinte ese cuadro de mandos.
Ya sea para la primera o la segunda opción, puedes ponerte en contacto con nosotros y te asesoramos.
Ventajas de realizar el cálculo de flujo de caja
Hay una ventaja por encima de todo de calcular el cashflow de tu empresa, y de esa es de la que queremos hablar.
Si realizas un cálculo de flujo de caja, vas a poder predecir como va a ser tu salud financiera en el tiempo, y cuando vas a tener la posibilidad de quedarte sin dinero en la caja, algo que estoy seguro que te interesa.
Estas predicciones te van a dar un plus de seguridad y de poder adelantarte a situaciones complejas.
Simplemente por esto, merece la pena tener un cálculo actualizado del cashflow de tu empresa.
A esto se le conoce como Cash Flow Forecast y te hablo más de él al final del artículo.
No siempre un cash flow positivo es bueno
Puedes tener una empresa con muchas ventas e ingresos y un cashflow negativo, así como puedes tener un flujo de caja positivo y que no sea algo bueno.
Por ejemplo, si vendes mucho pero tus proveedores te pagan tarde, puedes tener un problema de liquidez.
También puede ocurrir que tengas un flujo de caja positivo, pero que realmente esto esté ocurriendo porque no pagaste aún a los proveedores y, una vez lo hagas, este dato puede irse al negativo rápidamente.
Por eso, debes saber leer este dato para que te dé la información que necesitas.
Tipos de Cash flow
El cashflow no es único, por eso, hoy te quiero contar cuáles son los 3 tipos de flujos de caja más usados.
Flujo de caja de explotación
Este es el cashflow más normal, el que todos tenemos en la cabeza, ya que es el que nos da la situación de liquidez según la actividad directa de la empresa.
Ya sabes, desde la venta de productos o servicios hasta el pago de nóminas o proveedores.
Flujo de caja de inversión
Por otro lado está el flujo de caja de inversión, que tiene que ver con la actividad financiera e inmobiliaria de la empresa.
Es muy importante porque este flujo de caja suele tener un impacto muy grande en la cuenta de resultados, ya que suelen tener unos importes muy elevados.
Flujo de caja de financiación
Por último está el cashflow de financiación, que tiene que ver con las deudas y el capital del negocio.
Si bien es más estable y suele estar más controlado por el departamento financiero, también es de vital importancia tenerlo en cuenta.
¿Qué es el Cash Flow Forescast?
Por último, te quiero contar el último concepto, el de Cash Flow Forecast.
Este concepto traducido al castellano sería la previsión del flujo de caja en distintos espacios de tiempo.
Esto es importantísimo para poder predecir cómo va a ser la liquidez de tu negocio de cara a futuro, para detectar posibles problemas y adelantarte a ello.
Por supuesto, esta parte también se puede automatizar, y te va a ofrecer una información del negocio que es oro puro.